Kaixo berriro: Buenísima. No se me ocurre nada más que deir que es muy ocurrente, llena de filosofía. Seguro que Anxo no sabía lo que estaba diciendo, pero... en fin, que para ser lunes ya está bien. Musu.
"Érase una vez un niño de grandes ojos marrones, como los tuyos, que quería ser pirata. Al principio la idea no le hacía mucha gracia, pero cuando se enteró de que no necesitaba una pata de palo sino sólo saber cojear y que podía llevar un parche en el ojo sin ser tuerto, lo tuvo más claro. Si le preguntaban por qué pirata, engolaba la voz y decía: “Que es mi barco mi tesoro, que es mi dios la libertad...” Después corría hacia la costa y se pasaba horas mirando al infinito. Allí recordaba las palabras de su abuela. Ella le contaba que hay un lugar, allá en el horizonte, en el cual se unen el cielo y el mar, un punto en el que se funden los azules... Y justo ahí es donde quería llegar, estirar su manita y tocar las estrellas...
Y colorín colorado este cuento se acabó con una estrella en tu mano.
8 comentarios:
Kaixo berriro:
Buenísima.
No se me ocurre nada más que deir que es muy ocurrente, llena de filosofía. Seguro que Anxo no sabía lo que estaba diciendo, pero... en fin, que para ser lunes ya está bien.
Musu.
Deberías hacer un libro con estas pequeñas aventuras que nos cuentas...
Me encantan,
Abrazo grande
Ev.
jajaja interesante!!!
me tope por accidente co tu blog, me parece interesante espero te puedas asomar a mi venta un dia de estos..
En fin... todo fuera tan hermosamente ingenuo... un ojalá y un beso para ti.
Gracias a todos por vuestros comentarios, y en lugar de ir besándoos uno a uno, os mando UNO MUY GRANDE PARA TODOS!
Me quedo esta ilustración ;P
Es tan bonita...
"Érase una vez un niño de grandes ojos marrones, como los tuyos, que quería ser pirata. Al principio la idea no le hacía mucha gracia, pero cuando se enteró de que no necesitaba una pata de palo sino sólo saber cojear y que podía llevar un parche en el ojo sin ser tuerto, lo tuvo más claro. Si le preguntaban por qué pirata, engolaba la voz y decía: “Que es mi barco mi tesoro, que es mi dios la libertad...” Después corría hacia la costa y se pasaba horas mirando al infinito. Allí recordaba las palabras de su abuela. Ella le contaba que hay un lugar, allá en el horizonte, en el cual se unen el cielo y el mar, un punto en el que se funden los azules... Y justo ahí es donde quería llegar, estirar su manita y tocar las estrellas...
Y colorín colorado este cuento se acabó con una estrella en tu mano.
(...dulce sueño...)"
Un besote marino
Me encanta! qué facilidad la tuya para encontrar tan bonitas palabras, y unirlas para crear unos cuentos tan bonitos!
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